A veces tenemos ganas de algo dulce, pero no de encender el horno ni de llenarnos de azúcar. Estas tortitas de avena son la solución: fáciles, sin cocción y con ingredientes reales. Perfectas para acompañar un té, llevar de snack o tener en la heladera como salvavidas saludable.
Lo mejor: no necesitás ser chef. Son rápidas, versátiles y podés adaptarlas con lo que tengas en casa. Te comparto la base para que pruebes y después las personalices a tu gusto.
🍪 Ingredientes básicos
- 1 taza de avena arrollada
- 2 cucharadas de mantequilla de maní (o pasta de almendras)
- 1 banana madura pisada
- 1 cucharada de cacao amargo en polvo (opcional)
- Chips de chocolate, coco rallado o frutos secos (opcional)
👩🍳 ¿Cómo se preparan?
- Mezclá todos los ingredientes hasta formar una masa húmeda pero moldeable.
- Formá bolitas o aplastalas tipo tortitas.
- Llevá a la heladera al menos 30 minutos para que tomen consistencia.
Y listo. ¡Eso es todo! Se conservan varios días en la heladera y también podés freezarlas. Son una forma dulce y nutritiva de mimarte sin caer en lo ultra procesado.
La avena tiene fibra soluble que ayuda a regular el colesterol y genera saciedad. Combinada con banana y mantequilla de maní, tenés un combo energético natural ideal para media mañana o merienda.