Decidir cambiar no siempre viene con aplausos. A veces, los que te rodean no lo entienden, lo minimizan o incluso se burlan. Y eso puede doler. Pero no significa que estés haciendo algo mal. De hecho, suele ser señal de que estás saliendo del molde.
No necesitás que todos te entiendan. Necesitás mantenerte conectadx con tu “para qué”. Porque cuando el entorno no acompaña, tu convicción se vuelve tu mejor aliada.
🙃 ¿Por qué no te apoyan?
- Proyectan sus propios miedos o inseguridades.
- No les gusta verte cambiar porque eso los confronta con sus propios hábitos.
- Piensan que te cuidan cuando en realidad te frenan.
💪 Cómo sostenerte cuando estás solx en el cambio
- Volvé siempre a tu motivo: escribilo, repetilo, sentilo.
- Buscá micro-redes: una persona que te entienda vale más que mil críticas.
- Creá tu propio entorno: libros, redes, contenido que te inspire.
- Validá tu esfuerzo: lo que hacés por vos vale, aunque nadie lo aplauda.
Tu camino no tiene que ser compartido para ser válido. A veces, crecer duele. Pero quedarte donde no pertenecés duele más.
No estás solx: estás eligiendo distinto. Y eso, aunque incomode, es libertad.